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Tendero fue asesinado después de una noche de tragos en Cúcuta

El crimen ocurrió en la invasión Colinas del Tunal. El hombre recibió un golpe en la cabeza y dos puñaladas.

Una noche de tragos con música a alto volumen terminó en un homicidio en la invasión Colinas del Tunal, en cercanías a la cárcel de Cúcuta.

El crimen ocurrió sobre la medianoche del viernes, luego de que David Sierra Valencia, de 45 años, se tomara unas cervezas con un vecino en su casa, en la que también funciona una tienda que era de su propiedad.

Según un pariente de Sierra, el viernes su familiar salió a hacer unas diligencias y le encargó que le comprara el surtido de gaseosas para la tienda, que tenía en la manzana 8 lote 20 de esta invasión.

“Cuando volvió me pidió las llaves de la casa y luego vi que se encerró, prendió el equipo y se puso a tomar”, dijo el familiar.

Así transcurrieron las horas y luego de caer la noche, un vecino conocido de la familia arribó a la tienda y acompañó a David hasta las 11:00 p.m.

Según contaron los familiares de la víctima, Sierra le dijo a su amigo que se iría a dormir; sin embargo, el equipo de sonido siguió prendido.

“Yo me acosté a dormir tranquilo porque él (Sierra Valencia) acostumbraba a tomarse sus tragos ahí en la tienda con música”, dijo un primo de la víctima, que vive cerca al lugar del crimen.

Sobre las 12:00 de la noche, los vecinos del sector se percataron del homicidio de David.

El tendero recibió un golpe en la cabeza y luego fue apuñalado en dos oportunidades en el pecho; David cayó al piso y murió de manera instantánea.

Miembros de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) practicaron la inspección a la escena del crimen y el levantamiento del cadáver.

El comandante (e) de la Policía Metropolitana de Cúcuta, coronel Wiliam Donato, aseguró que se adelantan las investigaciones para esclarecer el homicidio.

Según se conoció, hace al menos dos meses Sierra Valencia tuvo un problema con un cliente luego de que el hombre, ebrio, no le quiso pagar la cuenta de las cervezas que se había tomado.

Al parecer, en medio de la discusión, se generó una amenaza.

La casa en la que ocurrió el crimen y donde solo vivía David, tenía las cosas desordenadas y revolcadas.

En el piso quedaron marcadas las huellas de la suela del zapato del homicida con rastros de sangre.

Las autoridades adelantan las pesquisas para ubicar al responsable del asesinato en este sector de la ciudad.

La Opinión

Sábado, 13 de Agosto de 2016
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