Según el más reciente balance difundido desde la Sala Situacional de la Guardia Nacional en el estado Táchira, Venezuela, en la entidad se han producido más de 200 manifestaciones contabilizadas en los 29 municipios de la entidad.
Las protestas, en su totalidad han sido convocadas en rechazo a las decisiones tomadas en contra de la Asamblea Nacional por parte del Tribunal Supremo de Justicia; y la crítica situación económica que aqueja a los venezolanos.
Marchas, plantones, barricadas y enfrentamientos con las fuerzas de seguridad registrados en Táchira durante los 45 días de protestas, han dejado tras de sí una persona fallecida, más de 50 heridos y cerca de 100 personas detenidas.
De acuerdo con la información suministrada por los cuerpos de seguridad, del total de 210 manifestaciones 147 han tenido un carácter pacífico y otras 63 se han desarrollado de manera violenta, incluyendo la quema de cauchos y la colocación de barricadas para impedir la normal circulación vehicular.
Las confrontaciones más violentas se registraron durante las primeras dos semanas del mes de abril, cuando marchas que se desarrollaban de manera pacífica devenían en fuertes enfrentamientos con las barricadas de las fuerzas del orden apostadas en los puntos de llegada, previamente designados por los manifestantes, al tiempo que se reportaban fuertes acciones represivas contra conjuntos residenciales en diversos puntos de la capital tachirense.
Posteriormente, la estrategia oficial cambió y los niveles de conflictividad social bajaron considerablemente. Ya los piquetes de la Guardia Nacional y los cuerpos policiales no esperan a los manifestantes al final de las marchas, por lo que las movilizaciones de ciudadanos realizadas en las últimas tres semanas han culminado de forma tan cívica como comenzaron.
Otra cosa es hablar de las llamadas “guarimbas”, donde grupos más radicales retienen vehículos de transporte público, levantan las tapas de alcantarillado y colocan barricadas que pueden ir desde llantas incendiadas hasta grandes ramas, tubos de encloacado, silos en desuso y cualquier cosa que permita obstruir la normal circulación vehicular.
En este tipo de situaciones es cuando se produce la acción de las fuerzas del orden, las cuales detienen a los manifestantes y retiran los obstáculos para devolver el tránsito a la zona.
Estrategia gubernamental
El gobernador Vielma Mora destacó recientemente que la ausencia de respuesta de los cuerpos de seguridad a las manifestaciones oficialistas corresponde a una estrategia muy bien estudiada.
Dijo así mismo que develaron una estrategia que con un aproximado de 120 cámaras de video, así como telefónicas listas en una intersección de las avenidas 19 de Abril y La Rotaria de San Cristóbal, donde se encuentran la Policlínica Táchira, el centro comercial El Este, Mc Donald’s “y una urbanización muy conocida”.
“Tenían vehículos particulares y de transporte públicos retenidos, porque el plan era que nosotros enviáramos a la Policía del Táchira o la Guardia Nacional y había una emboscada que sería filmada por esas cámaras para decir que la policía estadal, la GNB y la PNB atacaban, incluso tenían hasta granadas de humo para lanzarlas y el humo, por el tiempo y por la hora, regresaría a la Policlínica Táchira y la noticia sería que la PNB, la Guardia Nacional y la Policía del Táchira atacaron a un centro médico especializado muy querido en el Táchira”, sentenció.
Aseguró que al obtener la información sobre el plan, a través de labores de inteligencia, pidió “no caer en el juego de la derecha y dejemos que ellos mismos se mojen en si propio caldo”.
Inteligencia en frontera
Estamos empeñados- destacó-, en un plan que manejamos con el comisario general José Ricardo Pernía, quien me informó que ha aumentado la extorsión en la frontera como consecuencia de las actividades de la derecha recientemente.
Agregó Vielma que hay una comisión de la Subdelegación de San Antonio del Táchira, de la División de Investigaciones que estaba tras la pista de unos delincuentes que quieren azotar la zona y en un enfrentamiento resultaron heridos de muerte Valdespino Ángel Simón, apodado ‘El Valenciano’, y el segundo está por identificar, porque no llevaba documentación.
“Les capturamos un arma de fuego tipo revólver Smith & Wilson calibre 38, un arma de fuego tipo pistola calibre .27 y un bolso tipo morral contentivo de 91.850 bolívares, de diferentes denominaciones, había dinero venezolano y en pesos colombianos. Un tercer delincuente se dio a la fuga por el sector de La Invasión, donde están Barinita I, Barinita II y Che Guevara, cruzó el río y se fue para Colombia”, concluyó.
