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Lateralidad

Es muy evidente que el 99% de conductores de motocicleta adelanta los vehículos por la derecha.

Durante varios meses y a diferentes horas he observado en detalle el mal comportamiento que asumen los conductores de motocicleta en nuestra ciudad, aunque el problema es en todo el país y prueba de ello lo constituyen las alarmantes estadísticas de accidentalidad presentadas por los responsables de la movilidad.

Parte de las escalofriantes cifras pueden obedecer a un problema de lateralidad, al desconocimiento de la norma, a un abuso en contra de los demás conductores o todas las anteriores y por eso es oportuno traer apartes de la Ley 769 de 2002. Artículo 94 “…Deben transitar por la derecha de las vías…Los conductores que transiten en grupo lo harán uno detrás de otro…No deben transitar sobre las aceras, lugares destinados al tránsito de peatones y por aquellas vías en donde las autoridades competentes lo prohíban…No deben adelantar a otros vehículos por la derecha o entre vehículos que transiten por sus respectivos carriles…”

Al respecto es preciso señalar que la citada ley y las demás normas que la reglamentaron, pasaron por alto u omitieron definir la autoridad competente para realizar o validar las pruebas de conducción y por tal motivo, muchas personas que difícilmente aprendieron a manejar una bicicleta, se atreven a conducir una motocicleta ignorando por completo las obligaciones que les asisten.

Es muy evidente que el 99% de conductores de motocicleta incluidos los que representan la autoridad, adelantan los vehículos por la derecha, luego hacen un zigzagueo entre otros automóviles y si no están contentos, transitan por las aceras ante la mirada de todos los peatones que deben apurar su paso o correr porque a estos conductores, solo les importa llegar a su destino.

El hecho de que no distingan la izquierda de la derecha los coloca en un problema de lateralidad, situación que se complementa con la violación de todas las normas de tránsito existentes y de ahí que cuando ven una línea doble continua, interpretan que deben adelantar los demás vehículos generando escenarios de accidentalidad.

Ojalá podamos ver la nueva semaforización acompañada de fotomultas para reducir tanto abuso que se comete por la gran mayoría de estos conductores, porque la única forma de educarlos es sancionarlos y de una vez por todas, terminen con la ridícula excusa de que falta socialización a una norma que cumple 15 años de su promulgación.

El problema de las motocicletas no es solo en nuestra ciudad y por eso considero que las empresas que las venden, deben meterse más en el cuento de la responsabilidad social empresarial mediante el apoyo a las campañas que pueda emprender el responsable de la movilidad puesto que parte de la solución es la sanción y la otra, agresivas campañas de concientización. 

Sábado, 4 de Febrero de 2017
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